Dificultad de aprendizaje: ¿Por qué hemos esperado tanto tiempo?

»»Dificultad de aprendizaje: ¿Por qué hemos esperado tanto tiempo?

Juan, con once años, es un niño muy normal, fácil de llevar, muy juguetón, y se lleva bien con todo el mundo, tanto en la escuela, como en casa.

Pero le vemos demasiado dócil, todo le parece bien, no protesta, nos da la sensación de que sencillamente se deja llevar por lo que le rodea. No se opone a nada, rara vez aporta su opinión, simplemente se deja llevar. Los demás son siempre los que deciden por él.

En el colegio las cosas no van demasiado bien, él estudia, y hace todos los días los deberes. Pero a pesar de su esfuerzo e interés los resultados son muy mediocres. Y últimamente no le gusta mucho ir al colegio, por las mañanas nos cuesta muchísimo despertarle y organizarle para coger la ruta.

Lo que más me duele es que soy profesora del colegio, y no veo que esté avanzando con normalidad, va más lento que los demás. Lo veo triste, con miedo a equivocarse, y cada vez más retraído en sí mismo. Duele ver, como madre, que tú hijo está pasando de ser un niño alegre y divertido, a convertirse en miedoso e introvertido.

Ante esta situación, no sabía muy bien cómo abordarla, consultaba a compañeros y al departamento de orientación del centro, y no me sabían poner nombre a lo sucedía, pues era difícil de objetivar. Además, está situación cada vez tenía más transcendencia en casa, pues la actitud de Juan nos influía a todos.

En esta tesitura, oímos hablar de Tomatis, y consultamos con un terapeuta sobre si podía ayudar a Juan. Al contrario que al colegio, siempre va contento a las sesiones de escucha, además es una ocasión para estar los dos juntos y poder disfrutar haciendo pequeñas actividades.

Durante este tiempo, Juan ha mejorado muchísimo, está más seguro, más integrado en casa, especialmente ha mejorado mi relación con él. Además ha empezado a decir lo que le gusta y a oponerse a lo que no, es mucho más asertivo.

La convivencia en casa es más rica, ahora Juan es capaz de enfrentarse con su hermano mayor, dos años, y oponerse a sus deseos, antes era una marioneta, hacía lo que le ordenaba. Esto en principio crea más conflictos, pero nosotros vemos que mejora.

En el colegio este cambio ha tardado más en notarse, al principio incluso nos propusieron que estuviera en un grupo de apoyo, pero poco a poco ha ido mejorando, y al final ha terminado 6º aprobando todo.

Nuestra única queja: ¿Por qué hemos esperado tanto tiempo?

2020-09-07T13:08:20+02:00 19 abril, 2019|Testimonios|Sin comentarios

Deje su comentario